Supernovas y Energía Oscura
Cerca de un 70% de nuestro Universo está compuesto por energía oscura, resolver este misterio es considerado uno de los problemas más importantes de la cosmología actual.
La energía oscura es un componente de energía del Universo descubierto en 1998 y responsable de acelerar la expansión del espacio. Las observaciones actuales sugieren que esta energía proviene del espacio vacío, un concepto conocido como constante cosmológica y que fue introducido originalmente por Albert Einstein en 1917.
Pero, debido a que no tenemos un marco físico para guiar nuestras mediciones en esta área, debemos confiar en mediciones detalladas de la historia de la expansión cósmica local para obtener pistas acerca de la naturaleza general de esta fuerza: ¿evoluciona con el tiempo?, ¿es homogénea?
Distancias precisas a las supernovas -muerte explosiva de una estrella, un verdadero faro cósmico- proporcionan un mapa de la historia de la aceleración y de la forma general de la energía oscura y nos permite responder estas preguntas.
Una supernova un espectáculo maravilloso: las estrellas liberan su envoltura a velocidades de miles de kilómetros por segundo. Luego, se transforman en nubes parcialmente radioactivas, aún en expansión. En algunos casos, podemos observarlas a distancias de miles de millones de años luz, cuando el Universo era muy joven. Los remanentes de supernova inundan el medio interestelar con elementos pesados.
Las supernovas se caracterizan por su alto brillo, gran tamaño, altas velocidades de expansión y la presencia de gas radioactivo. Observacionalmente se clasifican en los tipos I y II.
Investigador principal: Alejandro Clocchiatti
Investigadores asociados: José Maza, Giulano Pignata, Franz Bauer